Foto: Onda Uno

En lo que era la previa del show en Laferrere, estuvimos hablando con Juanchi G Bisio, guitarrista de La Chancha Muda, conversamos un poco sobre su trayectoria, sus inicios en la músuca, su banda con amigos Catimbao, su paso por Los Piojos su llegada a La Chancha y muchas cosas más.

La entrevista completa en YouTube.

Recordas tus primeras nociones con la música? ¿Cuáles y dónde fueron? ¿En tu casa? ¿Con los pibes?

La primer conexión con la música fue familiar. Mi viejo siempre nos ponía mucha música fan de los Beatles, el fan de la bossa nova. Y con el instrumento con mi hermano en casa, había dos guitarras abajo de la cama. Entonces íbamos ahí sobre los estuches a tocar . Bueno mi abuelo músico también fue mi primer profe de Piano. Teníamos un órgano en casa que era de él, y ahí vamos también a jugar. Se que ahí fueron las primeras conexiones. 

Qué música escuchabas de más chico, cuales fueron y son tus influencias? ¿Cómo creés que eso te marcó hoy como músico o productor? ¿Hoy en día seguimos escuchando música como antes o con el trabajo no se puede tanto?

Lo que me pasa hoy, sí, escucho un montón de música. Me gusta escuchar bandas nuevas y estar siempre conectado. Es verdad que después de estar todo el día trabajando con música, vuelvo a casa y no siempre quiero escuchar música, pero bueno también con los hijos, que es una etapa nueva porque tengo hijos chiquititos siempre también estoy escuchando y trato de de ponerles música a ellos y compartir ahí con ellos.

Yo escuché de todo siempre, como te decía mi, mi viejo en casa, había muchos discos y escuchamos de todo. Y también escuchamos en los momentos familiares, compartíamos los trabajos o los jingles que hacían mi abuelo, mi tío, que nos hacía cantar mucho como coro infantil. Así que estuvimos muy conectados con la música con mis hermanos. Yo soy el menor de cuatro hermanos. Y bueno, después con mi hermano, conectamos mucho con los Stone, con el rock y de alguna manera escuchamos de todo. 

Entonces hoy día, como productor, siento que bueno que me nutrió eso. Escuchar música clásica, escuchar bossa nova. También como mi formación como músico, he estado en Brasil estudiando, estudié folklore,  como técnico, trabajé en John. Entonces vi pasar mucha música. Entonces siempre está bueno estar conectado.Y escuchar de todo, no encerrarse en un estilo. 

¿Sentís que hay algo de tu infancia o adolescencia que sigue muy presente cuando hacés música?

Y ante todo, la diversión, el juego. Eso creo que nunca hay que perderlo. Cuando se pierde  me imagino que ya no hay vuelta atrás. Y el gusto por la guitarra eléctrica, por la música negra, por el blues, por esos audios de pentatónica. Pero sí, creo que el momento de infancia, de adolescencia es muy importante. La formación de músico, pues también es cuando uno tiene más tiempo y desarrolla no. Y también esa cualidad de de esponjas, de absorber viste ahora de más grandes, los tiempos corren distintos.

Cuando fue el momento en que te diste cuenta de que lo de la música iba en serio, que podías hacer de eso tu trabajo?

Ya siempre quise, siempre lo tuve presente aparte porque desde muy chico también, como te contaba, estuvimos dentro un estudio de grabación grabando horas y horas. Entonces siempre tuve muy presente que era lo que quería hacer. Y muy seguro de eso como vocación. Así que, de una manera un poco a veces testaruda. Fui para adelante buscándolo, muy seguro, siempre estuve muy seguro. Capaz en los primeros trabajos, me di cuenta que iba en serio. Pero también a los dieciséis años ya estaba dando clase de guitarra, así que nada, siempre muy con mucha convicción.

Contame un poco de Catimbao, una banda que formaste con tu hermano y amigos, ¿cómo fue eso? ¿Qué lugar en tu vida ocupa?

Bueno, Catimbao fue un banda con mis hermanos de sangre. En realidad la banda la formé con Mauri Cuña, que era mi compañero de banco en el colegio y con Pacho Juan Ignacio Pita, que también es un compañero  de la vida que nos conocimos de adolescentes compartiendo la música. Y se formó en el bar de un amigo en Entre Ríos,  de ir de visita a Entre Ríos a la ciudad natal de un amigo, él terminó poniendo un bar y tocábamos en ese bar que era nuestro bar. Era Catimbao Bar y  terminó siendo Catimbao Band. Y una banda de diversión que terminó tomando otro rumbo, componiendo nuestras canciones, grabando dos discos y firmando contratos discográficos. Así que fue un momento de formación zarpado que ocupó un lugar muy importante en mi vida. 

Bueno, en realidad fue sin querer, nosotros empezamos ir a Entre Ríos, a divertirnos, a pasarla bien, a tocar hasta cualquier hora. Un año nuevo tocamos desde las doce hasta las cinco de la mañana. Era una banda de covers Catimbao, hacíamos covers y bueno, y teníamos una base rítmica de batería, de percu, y con Gonza que es mi hermano que tocamos toda la vida juntos zapábamos nos miramos y era bueno, vamos a fa y yo cantaba me ponía las letras de caradura, porque no era cantante. Entonces seguíamos hilando canciones y mezclando canciones.

Como es el paso ese que se da en decir entre amigos “bueno formemos una banda” y después pasar a sacar discos, tocar en vivo en lugares, compartir escenario con gente grosa de la música, que sentís viéndolo ahoraatrás en el tiempo?

Y bueno, esa banda de diversión y de zapadas, en un momento, empezamos a tocar en capital y empezamos a tocar temas propios. Yo tenía temas propios. Venía con ganas de armar una banda en serio, un proyecto serio. Viste como tenía la idea de que Catimbao no era un proyecto serio, y en un momento de Catimbao era mucho más importante que esa idea de proyecto que yo tenía en la cabeza, que no existía. Y empezamos a tocar composiciones mías, reggae y nos dimos cuenta que teníamos un montón de temas propios que nos gustaban y bueno, nos metimos en el estudio de mi tío, Daniel García a grabar unos demos. Y justo él estaba armando un sello discográfico y nos propuso si queríamos hacer un disco. Así que ese proyecto ah, que era muy, muy así de tracción a sangre, de golpe contaba con un estudio de grabación y con un contrato y bueno, nada ahí nos sentamos a charlar y fue bueno, esto va en serio. Así que, tomamos otra responsabilidad no, dejó de ser el viaje a Villa Elisa y pasó a ser un proyecto de a deveras.

Cómo fue la experiencia de haber estado con Los Piojos?, hay diferencias con respecto a otras bandas que estuviste? Qué sentiste al tocar en cada Ritual y en especial en River frente a toda esa gente? ¿Qué significa para vos haber formado parte?

Es un privilegio y un honor enorme, estamos hablando de una de las bandas históricas más convocantes del país y para mí fue increíble.

Yo venía de sacar el primer disco con Catimbao. Lo lanzamos en abril y al toque me llamaron para unos castings. Yo tocaba como sesionista en otras bandas. Y en una de esas banda tocaba Fer Cardero, que es un gran amigo, el hermano de Roger, me convocaron para los castings y nada. Y fui, me preparé, pero fui con expectativa más que quería ensayar con Los Piojos, que era una banda increíble y que yo había escuchado mucho y que me sabía muchos temas y que dando clases, mis alumnos me pedían muchas canciones, también los había visto en vivo muchas veces, los había visto en vivo en el Quilmes con mi hermano y veíamos en la pantalla a Seba y no lo podíamos creer. Y a los pocos meses me tocó estar ahí, fue increíble. Fue una de las experiencias más grosas que me tocó. Y tengo un cariño y un amor muy grande por Los Piojos. 

Y la diferencia con otras bandas, en realidad lo loco es eso, que cuando entré, cuando quedé, me di cuenta que en realidad era como Catimbao, pero en las grandes ligas, viste porque era una banda de amigos, y pasaba que las dinámicas eran las las mismas, lo que cambiaban eran los tamaños, los escenarios y la dimensión, el fanatismo y demás. Pero era eso, una banda de amigos jugando en primera. Increíble, la verdad que increíble, con todo lo que eso implica y tocar en un River frente a toda esa gente también, hicimos dos, pues tocamos en el Quilmes el de abril y al poco tiempo, el show que iba a ser en show Buenos Aires es el club donde yo me crié jugando al básquet. Se pasó a River y tocamos de nuevo en River. Así que en dos meses hicimos dos River en mayo y en abril, y fue increíble. Un sueño, osea algo con lo que yo de chiquito soñaba que tocaba en un estadio con la raqueta y de golpe estaba ahí, tocando con tremenda banda y cumpliendo un sueño y nada increíbles. Son recuerdos que no se van a borrar más.

Cómo fue tu llegada a La Chancha? ¿Cómo viviste el proceso de integración a la banda? ¿Cómo ves la evolución musical de la banda desde que llegaste?

La llegada a La Chancha llega porque con Seba, con Roger post Piojos, estábamos, como dupla de producción laburando juntos. Habíamos hecho un par de discos juntos, le grabamos el primer EP a Melanie Williams & El Cabloide

Fuimos producciones en las que grabábamos en el abasto con Alvaro Villagra y después veníamos acá mi estudio a hacer overdubs y demás y edición, y bueno de un día me dice che la banda de un alumno, un amigo, me encanta la tenes que escuchar y le vamos a hacer un disco. Y al final, el disco no se hizo, el disco era Sinfonía Libertarias. Y no lo hicimos nosotros los chicos lo hicieron con el “Pape” (Fioravanti), eh, que era una allegado a la banda, sonidista de la banda. Y al poco tiempo de que la banda grabó ese disco, me llaman para tocar la guitarra Dieguito le preguntó a Seba y le dijo llámenlo a Juan, y los chicos tardaron un rato en llamarme. Y bueno, cuando me llamaron fue hermoso también, porque fue después de tres años, ya no estaba en Catimbao,  se había disuelto Catimbao, habíamos frenado. Fue encontrarme de nuevo en una sala con amigos y todos, muy metidos en el proyecto. Fue muy lindo. 

Y la evolución de la banda, muy grande. Porque esto que te digo, estábamos los siete muy abocados al proyecto  y muy enfocados en crecer justamente, musicalmente, poder ser mejores ejecutores, mejores músicos y bueno, también, justo cuando entré, empezamos a componer los temas para La Peste, empezamos a tocar todos con click y nada, se ajustó un montón, en muchos sentidos. Así que estuvo bueno, fue un momento justo en el que entré porque creo que hubo un click grande, entre todos, entre los siete.

11- ¿Cómo es tu rol en el proceso creativo dentro de La Chancha ?

La Chancha tiene tiene una dinámica compositiva muy clara, hasta el momento que hoy día va evolucionando, por suerte, de una manera muy linda que bueno, tenemos el Gonza, es la letra, es el puño,y entonces él viene con con sus ideas, sus canciones y después todos,  trabajamos en lo que es la composición de cada instrumento  y cómo darle forma esa canción entre todos, como hacerla sonar. Y elegimos el rumbo, muchas veces las canciones tienen un rumbo muy claro. Y otras veces no tanto, Pero el rol es ese cada uno en su instrumento. No hay un productor en La Chancha, somos siete. Y a veces eso es lo difícil, son muchas voces, y estamos tratando de encontrar la dinámica para no pisar al otro o uno al desarrollar lo suyo, no detener el proceso creativo del compañero, eso es el desafío más grande, porque yo acá en el estudio con las producciones que hago de alguna manera soy yo el productor, viste y en la banda somos siete productores, hasta que llega el productor asociado, artístico en su momento fue Facu Rodríguez, en Quien Autoriza Ale Vázquez. Y bueno, ahora se viene otro disco y estamos en ese proceso justo, desarrollando las canciones. nosotros, hasta el momento que llegue el productor asociado .

12- Tanto hoy en día en La Chancha como en otros proyectos que estuviste, ¿sobre que te gusta componer, qué temáticas te gusta explorar y profundizar? ¿o es más de la inspiración del momento y de lo que estés atravesando en ese instante?

Yo en Catimbao componía mucho, las letras la gran mayoría fueron mías, después también compuse muchos temas con Mauri mi amigo juntos, después Gonza también empezó a traer canciones y tenían temáticas similares a la de La Chancha, un poco de protesta, descontento con el sistema y bajar alguna línea social. También había canciones de amor, historias personales introspectivas, análisis de no sé de la vida misma. Sinceramente, hace mucho no estoy escribiendo letras, así que hoy ya no sé qué temáticas me gusta explorar o profundizar muchos links con escritores que nos gustan como puede ser Galeano, y esta ese el link con la literatura, pero también, hay esa cosa de humana de de hablar de relaciones, no siempre son relaciones amorosas, pueden ser relaciones de una amistad o no sé, a veces, puede estar hablando de tus perros, no o de algún suceso que pasó en tu casa o en tu vida y está bueno, siempre si se hace también desde un lado poético y artístico y que tenga un vuelo, no que no sé algo tan literal o plano, chato, no, sino que tenga una riqueza en en la letra que que que te haga volar de alguna manera. Pero bueno, eso tiene que estar acompañado por la música también y que el viaje sea tanto en la narración como en lo sonoro.

¿Cuál canción o canciones crees que identifica a La Chancha, que digas este tema es la Chancha, que cuando la tocas en vivo tenes alguna sensación diferente, que sentís esa conexión muy fuerte con el público?

Conexión muy fuerte con el público, el caballito batalla de La Chancha, que es una declaración de principios zarpado, es Mar de Fueguitos, tal vez en el disco Quien Autoriza también hay muchas canciones muy bien plantadas. Realmente no hay una canción de La Chacha que no te haga sentir eso y eso es lo fuerte de la Chacha no, pero todas las canciones de las Chancha representan a La Chacha suenan a La Chacha y todas tienen una conexión especial con el público.

Obviamente, hay algunas que el público se enciende más, pero es muy loco porque hay canciones lentas o que vos crees que no van a funcionar y es increíble, cómo la gente las recibe y se prende fuego, y de hecho nos va pasando con un disco como Quien Autoriza ya tiene dos años que hasta el día de hoy sigue pasando cosas nuevas con el público, también se está acercando mucho público nuevo. Entonces, de golpe, tocas un tema que creías que no era de los más álgidos de la lista y explota todo, pero la Chancha creo que es una banda que está muy marcado a fuego la personalidad, los principios, los ideales. Y creo que hasta en canciones como Oración para los encerrados, nosotros le decimos usha, que es una canción que capaz que habla más de de algo más personal del Gonza, a su vez tiene tiene un mensaje muy fuerte y que identifica La Chancha, y se puede aplicar de mucha manera a cada uno lo escucha y puede flayarla para  donde quiera.

En una entrevista expresaron “no nos gusta como funciona el mundo” , de qué manera le hacen frente esta disconformidad, tanto desde un lado personal como también un lado artístico, como responde La Chancha ante esto?

Y el mundo está funcionando como el orto, está todo mal, hay guerras, saqueos está todo mal, políticamente también, hay una violencia institucional muy fuerte. Y nosotros cómo lo combatimos? haciendo arte, haciendo música, haciendo lo que nos gusta y tratando de bajar un mensaje de alguna manera de resistencia también. Y también, yo creo que en los show de La Chancha lo que se siente es también un abrazo, no? Como que vas a un show y te das cuenta de no estás solo, que hay un montón de gente que siente lo mismo y que canta las letras con la misma convicción. 

Así que creo que nuestra forma de resistir es esa, haciendo lo que nos gusta con todo el corazón y toda la convicción. Bueno, eh, por suerte, tenemos a Gonza que nos representa muy bien con su pluma. Pero sí, en este momento da para decir de todo, y creo que La Chancha es una banda que dice, basta con escuchar las canciones para entender de qué va.

¿Cómo ves el panorama actual del arte en el país?, teniendo en cuenta que capaz hoy en día la búsqueda artística en algunos géneros tiene que ver más con “pegar” algún estribillo para que suene en TikTok y las redes, y quizá la motivación para hacer música es la fama y reconocimiento, más que una búsqueda de decir algo que importe. ¿Qué opinión tenés de esto y en qué lugar aparece el rock hoy en día?

De alguna manera hay un resurgir del rock y seguramente también tiene que ver con que la actualidad la deja mucho que desear y mucho por decir, no siempre el rock es resistencia, ya el rock también se transformó en en en algo recreativo, no todas las canciones de rock bajan una línea, y está bien que eso sea y también que los artistas buscan el estribillo o estén buscando más nose, hay música que es más banal y  más liviana y no y que viene  llenar otro espacio, a mí me gusta que las canciones digan y que estén cargadas de sentimientos, no siempre son los sentimientos de e resistencia, pueden ser sentimientos de otra cosa , personales y demás. Pero bueno, nada, formo parte de una banda que tiene mucho por decir y por suerte tenemos, como te decía, eh, la pluma del Gonza  nos representa muy bien y estoy muy orgulloso de formar parte de una banda que baja una línea y que viene a decir algo en un momento en el que muchos no dicen nada.

Tenes un estudio de grabación, cómo nace esa idea y cuando te decidiste a materializarlo?

Bueno, como te contaba desde muy chico, estoy dentro de un estudio de grabación. Tengo el recuerdo, no sé de mi abuelo con un micrófono colgado en la lámpara de su casa grabando jingles, una máquina de cinta abierta. Bueno, mi tío pianista Daniel García, teniendo su estudio en su departamentito donde nos llevaba a grabar para jingles y discos infantiles. entonces, de alguna manera, siempre, lo tuve presente desde muy chico. Con mi hermano nos grabábamos había un grabador de cinta abierta muy viejo de mi casa, un Grundig de mi otro abuelo, y algunas veces experimentamos con eso, después algún geloso. Después también con las dobles caseras del minicomponente, grabar con un casete y un micrófono, después poner los dos cassettes y grabar, reproducir y grabar al mismo tiempo. Nada, siempre estuvimos ahí hasta que experimentando, un día un profe, mi primer profe guitarra, Maxi, me prestó una portaestudio de cuatro canales y hasta que algún día apareció una PC en casa y pudimos enchufar ahí a la placa on board de la compu y experimentar con un cool edit o con un key walk.

Así que desde muy chico estuve metido ahí en la música y en la grabación. Y bueno, cuando decidí al término del secundario ingresar en conservatorio, mi viejo me que tenía que estudiar algo más para complementar y estudié producción y grabación, y ahí en la casa de mi vieja empecé de a poquito con la com pegar una plaquita y ya desde desde muy joven, empecé a grabar y producir mis canciones, De hecho, el primer disco de Catimbao grabamos muchas cosas en mi casa también, si bien después contamos con el estudio de mi tío, mucho overdubs los hicimos en mi casa con un micrófono, un condenser más o menos bueno, un 57 y ahí aprender a los tiros.

Estando en ambos lados de la composición musical, ¿cuál te gusta más? y ¿que diferencias de formas de trabajar tenes en uno y en otro?

Y me gustan los dos, tal vez hace mucho tiempo estoy muy abocado a la producción entonces tengo un poco olvidado el compositor de letras y de canciones, pero estando produciendo todo el tiempo de alguna manera estoy componiendo, en la Chancha con Gonza y mis compañeros, vistiendo canciones, produciendo canciones, y acá en el estudio, muchas veces también a la hora de producir uno se mete en frases o en armonías o arreglos de caños o arreglos de cuerdas o elegir la línea de bombo de una batería, la estructura, los cimientos de una canción también es componer. Así que la verdad me gustan las dos maneras y bueno, cada tanto también escribo y  me sirve de terapia a veces sacar a través de la birome u hoy día los blogs de notas del celular.

¿Te queda algún sueño por cumplir dentro de la música?

Sí, claro, tocar siempre,  morirme tocando arriba de un escenario con amigos y haciendo la música que me gusta y por suerte con La Chacha estamos cumpliendo un montón de sueños, creciendo cada vez más y compartiendo momentos únicos. Así que me siento un privilegiado, después de haber tocado en River, con un proyecto como Los Piojos, haber grabado dos discos con mi hermano y mis mejores amigos y ya con La Chacha ahora encarando el tercer disco, hemos hecho discos en vivo también. La verdad que es un privilegio enorme laburar con productores que admiro y seguir haciendo discos. No me puedo quejar, es hermoso tener mi estudio, mi lugar de trabajo, me hace muy feliz.

¿De acá en un futuro cómo te ves profesionalmente? ¿te gustaría empezar algún otro proyecto? ¿Dedicarte más de lleno a la producción en tu estudio? ¿o es algo que no pensas mucho?

La verdad es que estoy muy feliz con mi presente, con mi estudio y La Chancha, sí me gustaría seguir desarrollando el proyecto de La Chacha, seguir tocando cada vez en escenarios más grandes. Que nos siga sorprendiendo, hemos ido a Colombia, hemos ido a los Cosquín, a los Quilmes, llenando Teatro Flores, ahora tenemos una gira muy linda, el sábado tocamos en Laferrere, después nos vamos Uruguay, estamos recorriendo el país, estoy muy contentos.

Me gustaría empezar otro proyecto, a veces sueño con hacerme una guitarra, así que me gustan mucho las herramientas el estudio la construí, yo a veces también sueño con hacerme un estudio nuevo en el medio del campo.

Pero estoy muy contento con mi proyecto y todos los días se aprende, tanto en la sala de ensayo con mi banda como acá en mi estudio con las bandas que produzco es un aprendizaje constante. Así que, bueno, los sueños también son, ver crecer a mis hijos y viste una cuestión más personal y familiar.